El veredicto de culpabilidad se produjo el segundo día de deliberaciones luego de un juicio en el que la Organización Trump fue acusada de ser cómplice de un plan de altos ejecutivos para evitar pagar impuestos sobre la renta personal en beneficios laborales como apartamentos gratuitos y carros de lujo.
La Organización Trump, la empresa familiar del expresidente Donald Trump, fue hallada culpable de fraude fiscal este martes en un caso presentado por la Fiscalía de Distrito de Manhattan.
El veredicto se produjo en el segundo día de deliberaciones luego de un juicio en el que la Organización Trump fue acusada de ser cómplice de un plan de altos ejecutivos para evitar pagar impuestos sobre la renta personal en beneficios laborales como apartamentos gratuitos y carros de lujo.
Como castigo, la Organización Trump podría recibir una multa de hasta $1.6 millones, una cantidad relativamente pequeña para una empresa de su tamaño, aunque la condena podría complicar algunos de sus acuerdos futuros.
La condena es una validación para los fiscales de Nueva York, que han pasado tres años investigando al expresidente y sus negocios. Pero no se espera que las sanciones sean lo suficientemente severas como para poner en peligro el futuro de la empresa de Trump.
El fiscal del distrito de Manhattan Alvin Bragg, a cargo del caso, dijo en un tuit que la Organización Trump fue condenada "por TODOS los cargos".
El caso por fraude contra la Organización Trump
El caso contra la Organización Trump se nutrió con los aportes al director financiero de la firma, Allen Weisselberg, quien en agosto se declaró culpable de 15 cargos de fraude fiscal, conspiración y hurto mayor a cambio de una sentencia muy reducida de cárcel por su testimonio.
Weisselberg reconoció que manipuló los documentos contables de la compañía y su propio paquete de indemnización para reducir ilegalmente sus impuestos.
A lo largo del proceso, los fiscales afirmaron al jurado que Trump sabía del fraude de Weisselberg, aunque el exmandatario no era parte acusada en el proceso.
Weisselberg indicó que él y el contralor de la empresa, Jeffrey McConney, planearon engañar a las autoridades estatales y federales durante un período de 15 años a partir de 2005, un período al final del cual, Trump estaba en la presidencia.
McConney, quien admitió haber cometido delitos y recibió inmunidad a cambio de servir como testigo del gran jurado en el caso, explicó cómo la empresa pagó gastos personales, lo que le permitió usar la compensación antes de impuestos de manera ilegal. Además, la Organzación Trump le pagó otros gastos que no se declararon como ingresos según exigen la ley.
El expresidente Trump, quien recientemente anunció que se postulará nuevamente a la presidencia, ha dicho que el caso contra su compañía era parte de una “cacería de brujas” por motivos políticos de parte de demócratas vengativos.
Un plan fraudulento que benefició a la organización y a la familia Trump
Los fiscales dijeron al jurado que Weisselberg o McConney eran “altos directivos” que actuaban a nombre de la compañía y que el plan también benefició a la empresa y por tanto, al expresidente Trump y su familia.
Pero durante todo el juicio, los abogados de la Organización Trump afirmaron que “Weisselberg lo hizo por Weisselberg” y sostuvieron que el ejecutivo había traicionado la confianza de la empresa. Nadie en la familia Trump o en la empresa era culpable, argumentaron.
Weisselberg afirmó que nadie en la familia Trump sabía lo que estaba haciendo: “Fue mi propia codicia personal la que me llevó a esto”.
La Fiscalía le prometió a Weisselberg una condena de cinco meses en prisión a cambio de su testimonio.
No hay comentarios:
Publicar un comentario